El jefe de la Marina alemana dijo el martes que varios buques de guerra de Berlín fueron saboteados.
El vicealmirante Jan Christian Kaack, inspector de la marina alemana, dijo en una conferencia de prensa el martes que el daño afectó «a más de una unidad». Kaack también dijo que hubo intentos de robo en bases navales alemanas por tierra y mar, y habló de «intentos de acercarse» al personal uniformado mientras se dirigían a casa.
El vicealmirante no dio más detalles sobre los intentos de sabotaje ni dijo explícitamente quién estaba detrás de ellos. Pero Kaack lanzó una advertencia general sobre Moscú mientras hablaba con los periodistas. «La creciente amenaza de Rusia es más urgente a principios de 2025 que hace dos años», dijo.
Los comentarios de Kaack siguen a un informe publicado el lunes por el medio local Süddeutsche Zeitung, que dijo que la policía alemana estaba investigando un incidente en un astillero de Hamburgo donde varias docenas de kilogramos de virutas de metal fueron arrojadas al sistema del motor de un buque de clase corbeta.
El informe conjunto de las emisoras WDR y NDR dijo que la corbeta era un barco nuevo llamado «Emden» que estaba esperando ser entregado al ejército alemán. Está previsto que se despliegue en el Mar Báltico, informaron los medios.
Süddeutsche Zeitung escribió que si las virutas no se hubieran detectado durante una inspección, habrían causado daños importantes al barco.
En la conferencia de prensa del martes, se le pidió a Kaack que abordara el informe de Süddeutsche Zeitung, pero no confirmó directamente el incidente de Emden cuando habló sobre el sabotaje.
El Emden es una de las cinco nuevas corbetas K130 que Alemania ordenó para su entrega en 2025 para cumplir con sus requisitos de la OTAN. Naval Vessels Lürssen, la empresa responsable de la construcción de los barcos en Hamburgo, dijo a Agence France-Presse (AFP) que el Emden había completado recientemente una «prueba de mar exitosa».
Alemania ya está en alerta máxima por intentos de sabotaje después de múltiples incidentes en los últimos dos años, entre ellos un paquete que se incendió en un avión y un incendio en una fábrica de municiones en Berlín.
Más recientemente, una fábrica de municiones alemana en España sufrió una explosión a fines de enero que hirió a seis trabajadores.
Las autoridades alemanas han sugerido repetidamente que Rusia es el principal sospechoso, pero aún están investigando muchos de estos casos.
Los aliados de Ucrania han acusado a Rusia de librar una «guerra híbrida» contra Occidente, con informes de un intento de asesinato contra el director ejecutivo de un contratista de defensa y la creciente evaluación de que los petroleros vinculados a Rusia dañaron los cables de infraestructura submarina en el Mar Báltico.
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